Falla gobierno al no publicar Reglamento para la Integración y Funcionamiento del Consejo de Prevención Social del Delito y la Violencia en el Distrito Federal: Aleida Alavez
13 de Agosto de 2017
- Hace casi tres años fue publicada la Ley para la Prevención Social del Delito y la Violencia para el Distrito Federal, pero no hay reglamento
- El mejor mecanismo para combatir la violencia y la comisión de delitos es generar políticas sociales coordinadas, pero al gobierno parece no interesarle ir a las causas
- El combate a la delincuencia va más allá de policías y ladrones
La diputada Aleida Alavez demandó al Gobierno de la Ciudad de México publicar el Reglamento para la Integración y Funcionamiento del Consejo de Prevención Social del Delito y la Violencia en el Distrito Federal, porque ha impedido la instalación del consejo que elaboraría políticas sociales para combatir desde la raíz la delincuencia.
Al denunciar que esta “omisión” tiene ya casi tres años de retraso, acusó la falta de sensibilidad e interés delgobierno de Miguel Ángel Mancera para que la Ciudad de México cuente con un consejo que se encargaría de elaborar las estrategias institucionales y líneas de acción del gobierno y las delegaciones que inciden en la prevención social del delito y la violencia.
Alavez Ruiz lamentó que a pesar del fallido combate a la delincuencia de la administración local, que ha derivadoen altos índices de inseguridad, el Jefe de Gobierno no haya expedido este reglamento. Por ello, llamó a hacerlo de inmediato y convocar a la instalación de este consejo, a fin de contar con un mecanismo que atienda las causas de la delincuencia y violencia en esa ciudad.
La legisladora de MORENA demandó aclarar las razones por las que no se ha cumplido con el artículo cuarto transitorio de la Ley para la Prevención Social del Delito y la Violencia para el Distrito Federal que otorga un plazo de 90 días naturales para publicar el reglamento. Este decreto fue publicado el 28 de octubre de 2014.
Manifestó su preocupación de que un tema tan sensible para los capitalinos no sea atendido desde la raíz y se evada con recovecos legaloides u “olvidos premeditados”, para dejar de lado una ley que reivindica la necesidad de enfrentar la violencia y la comisión de delitos a través de la aplicación de políticas públicas sociales coordinadas entre diversas dependencias delgobierno central.
Este retraso de casi tres años, insistió, demuestra el desinterés por ir al fondo del asunto y limitar esta obligación a un tema de “policías y ladrones”, sin demeritarlo. Requerimos programas sociales efectivos que atiendan las causas, agregó.
Es inadmisible que a pesar de los números que arroja la encuesta del INEGI de junio pasado, en la que nueve de cada 10 habitantes califica como insegura a la Ciudad de México, siga sin publicarse el reglamento para la Integración y Funcionamiento del Consejo de Prevención Social del Delito y la Violencia en el Distrito Federal.
Es tiempo de hacer frente a la delincuencia de manera integral y reconocer lo qué está pasando en esta ciudad. “Nuestro deber es vigilar que se cumplan las leyes y se apliquen programas preventivos que combatan el avance de la delincuencia y la violencia”, afirmó.
Lamentó que por esta “omisión” se carezca de un programa preventivo de la violencia y de políticas, programas, estrategias y acciones que deberá instrumentar la Administración Pública del Distrito Federal en esta materia. Además, de estudios sobre las causas estructurales del delito; la distribución geodelictiva y estadísticas de conductas ilícitas no denunciadas y prevención social del delito y la violencia, entre otras tareas encomendadas a dicho consejo.
De haber sido emitido en tiempo y forma, quizás en estos momentos los índices delictivos no se hubieran disparado de esa forma, porque se estarían aplicando políticas públicas sociales integrales, como las que generó en su momento el gobierno de Andrés Manuel López Obrador.
Y recordó que en el sexenio 2000-2006 se establecieron en el Plan General de Desarrollo para la capital las Coordinaciones Territoriales de Seguridad Pública y de Procuración de Justicia, con las que se estableció un vínculo de cercanía con las quejas ciudadanas y las autoridades, que a la postre arrojó buenos resultados en el combate a la delincuencia.
