EN 30 AÑOS, GDF, UNAM, IPN, CMIC, FOVISSSTE, INFONAVIT E INVI, HAN IGNORADO HUNDIMIENTOS DE VIVIENDAS EN CDMX
23 de Diciembre de 2015
• Entes contravienen tratados internacionales sobre el Derecho Humano a la Vivienda digna y decorosa para más de 20 mil familias
• En 2014 se registraron siete mil 234 Unidades Habitacionales en riesgo por deterioro, hundimiento y grietas, adicionales a las 12 mil en riesgo
• Además de reformar Ley de Vivienda, necesario reparar millares de casas en la CDMX; de no hacerlo se incurriría en delito de omisión
En más de 30 años, la comunidad científica y educativa, los gobiernos Federal, capitalino y delegacionales, además de los integrantes de los Colegios de Ingenieros y Arquitectos, así como de la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción (CMIC) han sido omisos y apáticos al no responder con efectividad a las justas demandas de viviendas dignas y decorosas para más de 20 mil familias que habitan en casas a punto de desplomarse por estar construidas en zonas de grietas, suelos inestables, granulares y arcillosos en la Ciudad de México.
Así lo manifestó la diputada Ana Juana Ángeles Valencia quien reprochó se contravengan los tratados internacionales que respaldan el derecho humano a la vivienda como se destaca en la propia Constitución y Declaración Universal de los Derechos Humanos al no atender el llamado de auxilio de millares de familias.
Hizo notar que las autoridades han dado mayor impulso a la construcción de grandes proyectos arquitectónicos como si la Constitución previera un fuero económico en donde los que tienen el poder adquisitivo gocen de todas prerrogativas que les otorga la ley y por el contrario, los que carecen de ello estén en desventaja, contemplados en un plano de discriminación y desigualdad social.
Precisó que las autoridades Federales, del Gobierno del Distrito Federal (GDF) y delegacionales deben resolver con prontitud los hundimientos y mejorar las condiciones de inseguridad en que viven los habitantes de Unidades Habitacionales y edificaciones diversas porque de no hacerlo incurrirían en el delito de omisión.
Convocó a la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), al Instituto Politécnico Nacional (IPN), al Instituto de Geofísica de la UNAM, a los Colegios de Ingenieros Militares y Civiles, vulcanólogos, sismólogos, hidrólogos y calculistas de estructuras, constructoras nacionales y extranjeras, al FOVISSSTE, INFONAVIT, INVI, a las Secretarías de Obras, de Protección Civil del Distrito Federal y la comunidad científica del país a diseñar soluciones reales a problemas reales.
Las construcciones del Distrito Federal edificadas sobre grietas, socavones y suelos granulares deben ser reparadas de manera urgente, antes de conformar una nueva Ley de Vivienda local, dijo Ángeles Valencia.
Consideró urgente conformar un nuevo marco legal para reformar dicha ley porque habitantes de diversas delegaciones que actualmente viven en este tipo de hogares deben contar con el apoyo irrestricto de las instituciones de educación superior y de los organismos que tienen que ver con la industria de la construcción en México.
Ángeles Valencia resaltó la importancia de establecer mecanismos precisos de suelo, donde antes de construir, existan estudios previos del subsuelo de la Cuenca del Valle de México, hidrología y geología.
Aportó que se deben definir las reglas de construcción, donde las grandes empresas que dañen el entorno sean quienes paguen los daños a los habitantes originarios o con mayor antigüedad en las zonas colindantes a las magnas edificaciones.
Dijo que hasta el año pasado se registraron siete mil 234 Unidades Habitacionales en riesgo por deterioro, hundimiento y grietas, adicionales a las 12 mil 714 edificaciones registradas en las delegaciones Benito Juárez, Cuauhtémoc, Venustiano Carranza, Azcapotzalco y Miguel hidalgo, cifras dadas a conocer por el Instituto para la Seguridad de las Construcciones (ISCDF) y la Procuraduría Social del Distrito Federal (PROSOC)
Destacó que en Iztapalapa existen mil 71 manifestaciones de grietas, equivalente a unos 100 kilómetros lineales, además de las afectaciones a las estaciones del Metro Guelatao, Peñón Viejo, Acatitla y Santa Martha en la Línea A.
Refirió que en esta demarcación hay por lo menos 20 escuelas en situación de riesgo localizadas en las colonias Consejo Agrarista, Lomas de San Lorenzo, La Era, Francisco Villa, La Polvorilla, Pueblo de Santa Cruz, Unidad habitacional Santa Cruz y Jacarandas.
Citó el caso registrado en la delegación Iztacalco, en el inmueble ubicado en Francisco del Paso y Troncoso, Colonia Santa Anita, con la misma problemática, la Unidad Habitacional Lindavista-Vallejo, donde 26 edificios están en riesgo de derrumbarse.
La legisladora de Morena recalcó que es necesaria la aportación de todos para conformar una nueva Ley de Vivienda del Distrito Federal acorde a las demandas de infraestructura urbana que ayudarán a establecer un nuevo marco legal y jurídico en esta materia en beneficio a los ciudadanos, pero antes, acotó, es necesario reparar las miles de viviendas dañadas por los hundimientos, sobrepoblación, falta de mantenimiento o por la mala calidad de los materiales utilizados.
Comentó que también existe la posibilidad de reciclar los predios donde las habitaciones ya están deterioradas, es decir, agregó, derribar y construir en el mismo predio viviendas de al menos 65 metros cuadrados y ascenderlos a por lo menos seis o siete niveles para acabar con los hacinamientos familiares, dar calidad de vida a las familias extendidas y facilitar créditos familiares.
Destacó a que a través de una consulta ciudadana organizada y acreditada se pueden delinear nuevas leyes de vivienda que correspondan a satisfacer las necesidades de los capitalinos en esta materia y no en beneficio de las grandes constructoras nacionales y extranjeras, para quienes una vivienda digna sólo significa un techo donde resguardarse.
Debemos asumir la responsabilidad que nuestra nación adquirió al firmar tratados internacionales para el acceso al derecho humano a la vivienda como se destaca en la Declaración Universal de los Derechos Humanos, recalcó.