CONSTATAN DISPOSICIÓN DE AMBULANTES POR REGULARIZARSE
02 de Marzo de 2014
El Presidente de la Comisión de Abasto y Distribución de Alimentos de la ALDF, Dip. Rubén Escamilla, se congratuló que organizaciones populares de comerciantes informales estuvieran de acuerdo en analizar los esquemas para ser regularizados, esto, previo al foro “Consulta Abasto, Comercio Popular y en Vía Pública del DF”.
En reunión con los dirigentes de varias agrupaciones como son la Asociación de Invidentes del DF, la Unión de Marchantes A.C., la Alianza de Comerciantes A.C. y el Circuito Maní, el legislador del PRD, acompañado de las diputadas del PRI, Alejandra Barrios y del PT, Miriam Saldaña, escucharon las quejas de los comerciantes y a su vez atestiguaron la voluntad de los mismos por formalizarse, pagar impuestos, ordenarse, mantener limpia la vía pública y otras obligaciones.
Los vendedores pidieron que no se les responsabilice de todo lo malo que ocurre en varios puntos de venta y que más bien, las autoridades del Gobierno del Distrito Federal comprendan que el comercio informal ha sido una válvula que ha ayudado a controlar problemas sociales como son la prostitución, la delincuencia y el desempleo.
En el salón Benito Juárez, de la ALDF, pidieron que así como se busca formalizarlos, también se ponga en orden a las tiendas de autoservicio y de conveniencia pues continúan instalándose en la cercanía de mercados públicos y de puntos de comercio popular, lo que representa una competencia desleal ya que los supermercados cuentan con más productos y en ocasiones hasta logran ofrecerlos más barato debido a los altos volúmenes de comercialización que manejan.
Se estima que en la ciudad de México, 70% de los vendedores en vía pública no cuentan con permiso para expender sus productos, por lo que constantemente son blanco de operativos policiacos y delegacionales para detenerlos y quitarles sus mercancías ante la ilegalidad en la que aparentemente se encuentran.
Los comerciantes expresaron que quieren dignificar su labor, no heredar pedazos de banqueta, que se les den oportunidades para tener comedores populares, plazas comerciales y que cuando se les retire de la calle no sean colocados otros grupos de comerciantes, porque de seguir este tipo de prácticas, definitivamente no se terminara con el problema.