Elizabeth Mateos alza la voz contra el flagelo de la mutilación genital femenina
10 de Febrero de 2018
- Actualmente la MGF atenta contra más de 200 millones de mujeres en 28 países.
La mutilación genital femenina (MGF) no aporta beneficios a la salud de mujeres y niñas, contrariamente produce graves trastornos físicos que pueden llevar a la muerte, de ahí la importancia de elevar la voz y exigir a los gobiernos de los países, la prohibición y erradicación inmediata de esta brutal práctica en contra de millones de mujeres, afirmó la legisladora Elizabeth Mateos Hernández.
Durante la Cumbre Mundial de las Naciones Unidas sobre el Desarrollo Sostenible de 2015, 193 Estados acordaron de forma unánime eliminar la Mutilación Genital Femenina hacia el 2030, como nuevo objetivo mundial, por ser una práctica que violenta y marca a niñas y adolescentes de por vida, pone en peligro su salud, además de privarlas de sus derechos humanos, negándoles la posibilidad de alcanzar su pleno potencial, destacó Mateos Hernández.
La presidenta del Comité de Asuntos Internacionales en la ALDF dijo que actualmente la MGF atenta contra más de 200 millones de mujeres en 28 países de Asia, Australia, Europa, América del Norte y del Sur, África y el Oriente Medio en donde más prevalece esta práctica y cada año afecta a más de tres millones de niñas.
En México no existe la mutilación genital femenina, pero no podemos cerrar los ojos y quedarnos sin hacer eco a las voces de millones de mujeres y niñas a las que se les violentan sus derechos humanos y por consecuencia, constituye una forma extrema de discriminación hacia la mujer; es el momento de solidarizarnos y exigir un alto al flagelo que no sólo las lastima a ellas, sino a todas las mujeres del mundo, enfatizó Mateos Hernández.
Es importante apoyar a un número mayor de mujeres, niñas y adolescentes que han sufrido la mutilación genital femenina, brindarles servicios de salud, apoyo emocional para hacerlas más fuertes ante el trauma sufrido, sobre todo, empoderarlas para levantar sus voces contra la MGF, actuar colectivamente y poner fin a la práctica. Es imperante atender las necesidades de salud sexual y reproductiva de las mujeres y niñas que sufren sus consecuencias, subrayó.
La violencia de la Mutilación Genital Femenina refleja y refuerza la discriminación y atenta directamente contra la humanidad, es momento de hacer un alto y no permitir más ese tipo de prácticas que lastiman y denigran a la mujer, finalizó Elizabeth Mateos
