GP Morena presenta estudio sobre impacto negativo en el turismo de la Ciudad de México por cierre de aeropuerto internacional
19 de Julio de 2016
· Que no nos pidan perdón; lo que queremos es respeto a los derechos de la ciudad, demandan
· El costo del aeropuerto en Texcoco se eleva a 247 mil millones de pesos, es decir 78 mil millones más de lo presupuestado por el tipo de cambio actual, revelan
· La ocupación hotelera en la Ciudad de México se reducirá en un 19.5%, lo que significaría un inmenso e histórico retroceso, acusan
· El gobierno capitalino miente al afirmar que no se perderán empleos; el gobernador del Edomex ya dijo que gestionará para que los 600 mil nuevos empleos se queden en esa entidad
Al demandar respeto a los derechos de los mexicanos, no que nos pidan perdón, diputados de MORENA insisten en que el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México “Benito Juárez” (AICMBJ) continué operando y convertir al de Santa Lucía en una terminal aérea alternativa.
En conferencia de prensa, los legisladores presentaron el estudio
El Nuevo Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México y sus Efectos Económicos sobre el Turismo elaborado por el ex secretario de Turismo del DF y asesor de MORENA, Carlos Mackinlay.
Los diputados acusaron a los gobiernos federal y local de concebir el traslado de la terminal aérea como un negocio, no como un asunto técnico. Aclararon que no defienden dejar el AICMBJ como opera actualmente, porque reconocen que está saturado. Por ello, el aeropuerto de Santa Lucía es una inmejorable alternativa que no afectaría las operaciones militares y ayudaría en el control de aduanas.
Señalaron que ambos aeropuertos pueden operar sin problemas, como sucede en las zonas metropolitanas de muchas capitales del mundo.
La diputada María Eugenia Lozano resaltó que cerrar la actual terminal aérea significa desplazar y trasladar uno de los centros económicos y estratégicos del país fuera de la Ciudad de México, lo que la convertiría en la única capital del mundo sin aeropuerto.
Además, criticó el costo que tendrá construir el aeropuerto en Texcoco, porque al tipo de cambio actual la inversión se eleva a 247 mil millones de pesos, es decir 78 mil millones más de lo presupuestado.
Cerrar el aeropuerto internacional significará amputar a la Ciudad de México de uno sus espacios más productivos, más pujantes y con mayores posibilidades de impulsar transformaciones urbanas, indicó y dijo que de acuerdo con cifras de la Secretaría de Desarrollo Social del Gobierno de la Ciudad de México se perderían 33 mil 400 empleos directos que producen más de 82 mil 300 millones de pesos al año.
Y fue más allá al detallar que entre el aeropuerto y su zona aledaña genera 48 mil 500 empleos directos, lo que representa 47% de los empleos que se crearon en 2015 en esta ciudad.
Acusó al gobierno de la Ciudad de México de mentir cuando afirma que estos empleos se reubicarán en la nueva terminal aérea. Ello, porque el gobernador del Estado de México declaró que cuando opere se crearán más de 600 mil empleos, por lo que “gestionarán para que sean para los mexiquenses”.
Entre los impactos negativos que generará el cierre del aeropuerto, mencionó las afectaciones a la actividad turística, como la pérdida de más de 8 millones de turistas noche, equivalente a mil 269 millones de dólares de derrama económica, y más de 178 mil empleos directos e indirectos; la ocupación hotelera se reducirá en un 19.5%, lo que significaría un inmenso e histórico retroceso.
El diputado José Alfonso Suárez del Real y Aguilera criticó que se insista en afectar el vaso regulador de Texcoco para beneficio de unos cuantos que sólo ven el negocio, por lo que exigió que “no nos pidan perdón, lo que queremos es respeto a los derechos de la ciudad”.
En tanto, Darío Carrasco pidió que se aclare cómo se rescatará la inversión de 105 mil millones de pesos que hay en el aeropuerto actual, además de lo que se invirtió en el nuevo hangar presidencial y otras instalaciones del gobierno. Esto demuestra que a los gobiernos actuales lo que menos les interesa es cuidar los recursos públicos.
Por su parte, David Cervantes dijo que el traslado del aeropuerto internacional es una política compartida por el gobierno de esta ciudad y los partidos políticos que firmaron el Pacto por México. El fondo del asunto, agregó, es que los recursos públicos se utilizan para facilitar la inversión privada y obtener mayores ganancias en menor tiempo, a costa de la devastación ambiental.
El estudio que se entregará a los gobiernos federal y local y la Cámara de Diputados y la Asamblea Legislativa, aborda la viabilidad económica, el despilfarro de recursos, la opacidad en el manejo de los recursos económicos, el aspecto ecológico y ambiental, el empleo en la Ciudad de México, la incertidumbre sobre el destino de los terrenos donde está actualmente, afectaciones al turismo y la necesidad de otro aeropuerto en el Valle de México.
En la conferencia estuvieron además los diputados Olivia Gómez Garibay, Citlalli Hernández Mora, Néstor Núñez y Paulo César Martínez, así como el ex secretario de Turismo Carlos Mackinlay.