Irá Movimiento Ciudadano por ley para sancionar violaciones al código de ética y conducta de la ALDF
30 de Junio de 2016
El coordinador del Grupo Parlamentario de Movimiento Ciudadano en la ALDF, Armando López Campa, informó que ya alista una iniciativa de Ley para que el Código de Ética Parlamentaria sea aplicable a los tres órdenes de Gobierno y tenga un efecto vinculante.
Al respecto, dijo que uno de los retos más importantes que enfrenta la Ciudad de México en el tránsito hacia una entidad federativa con nuevas facultades, es contar con el andamiaje jurídico que sea de observancia general, que le permita dar respuesta a los procesos políticos y sociales con legitimidad, “y para ello es fundamental la rendición de cuentas y la transparencia”.
Recordó cómo en fechas recientes, los legisladores han sido testigos del desdén de algunos funcionarios de la Administración Pública para acudir o atender los llamados a comparecer ante el pleno de la Asamblea Legislativa.
“Algunos legisladores hemos sido objeto de insultos y descalificaciones por pretender citar a comparecer a responsables de áreas cruciales de nuestra ciudad para que en el ámbito de sus atribuciones expliquen a esta Asamblea los pormenores de la función pública que les compete”, indicó.
En ese marco, consideró indispensable fortalecer y difundir la cultura del respeto, honestidad y transparencia que haga la rendición de cuentas un hábito entre todos los servidores públicos.
Celebró que la Diputación Permanente aprobara por unanimidad la propuesta que formuló para que el Código de Ética y Conducta Parlamentaria sea también aplicable a los otros poderes del Gobierno y de los organismos públicos de la Administración Pública centralizada y descentralizada de la Ciudad de México, “este fue un primer paso y ahora trabajaremos en una iniciativa de Ley que le dé un efecto vinculante a esta norma jurídica”, expuso.
Asimismo, refirió que en abril de 2014 la VI Legislatura de la ALDF aprobó un Código de Ética de los Servidores Públicos del Distrito Federal con el ánimo de promover que la cultura de la transparencia, objetividad y compromiso con la sociedad y las instituciones fuese un instrumento que garantizara con todo vigor la honestidad y por su naturaleza podría servir como base para un Código más amplio de aplicación general.