Miércoles 03 de Julio de 2024

Transmisión en vivo
Play

Sin transmisión

Agenda del día
Sin Actividades Legislativas

TEMA
DEL DÍA

AL INSTANTE

Noticias

Principal / 

LEGISLAN POR RELACIONES LABORALES SANAS

LEGISLAN POR RELACIONES LABORALES SANAS

25 de Octubre de 2011

A partir de hoy, el acoso laboral también denominado “mobbing” es considerado un problema de salud pública, por lo que aquel trabajador que sea víctima de maltrato u hostigamiento podrá recibir el apoyo psicológico necesario para enfrentarlo, aseguraron los diputados Mariana Gómez del Campo Gurza y Jorge Palacios Arroyo, del Pan, impulsores de la reforma al artículo 63 de la Ley de Salud local.

Por mayoría parlamentaria, diputados de todas las fuerzas políticas respaldaron la iniciativa de los legisladores de Acción Nacional para mejorar las condiciones de los trabajadores de la capital, con lo que también se sienta un precedente para proteger su integridad y mejorar el clima laboral.

La también coordinadora del Grupo Parlamentario del PAN y el integrante de la Comisión de Salud se congratularon del gran paso que desde la ALDF se ha dado a favor de la salud de quienes sufren cualquier forma de maltrato en sus centros de trabajo.

Ahora, los gritos, golpes, hostigamiento y hasta la indiferencia de un jefe a un subalterno, igual o a la inversa del escalafón, son motivo para que el afectado junto con su agresor acudan ante un especialista del sector salud, para recibir la atención correspondiente, con el objetivo de revertir cualquier afectación física y mental.

Los diputados indicaron que el mobbing no debe ser tratado como un ente aislado, ya que su impacto no sólo repercute en el área laboral, sino en las familias y la sociedad en general, pues es un fenómeno que está en aumento y de no tomarse las medidas correspondientes representará un problema de mayores dimensiones.

Recordaron que la iniciativa fue presentada hace cinco meses, como una respuesta a las múltiples quejas que trabajadores de distintas áreas, ramos y empresas les hicieron llegar a través de diversos medios. Algunos de esos casos, considerados alarmantes, se registraron en la Secretaría de Cultura capitalina y le valieron a la dependencia múltiples denuncias anónimas.