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NECESARIAS PARTIDAS ESPECIALES PARA LA CAPITAL DEL PAÍS

NECESARIAS PARTIDAS ESPECIALES PARA LA CAPITAL DEL PAÍS

08 de Agosto de 2011

El diputado Octavio West participó en la sexta edición del Foro Encuentros por el Futuro de la Ciudad de México, en su intervención con la ponencia Costos y Beneficios de la Capitalidad, resaltó la necesidad de obtener partidas especiales para que la capital mantenga debidamente su infraestructura, su calidad de servicios y su competitividad.

Remarcó que en el enfoque que ha asumido la administración del DF, pareciera que solamente buscan más recursos, so pretexto compensatorio, sin embargo, de lo que debe de tratarse es establecer una función óptima de capitalidad. El DF es el lugar común de todos los mexicanos, la ciudad de todos, y por ende se tienen que emprender acciones para hacer permanecer y acrecentar su desarrollo, es fundamental optimizar los beneficios y minimizar los efectos e impactos negativos que conlleva la capitalidad.

Durante el evento organizado por la Comisión del Distrito Federal del Senado de la República, que preside la senadora María de los Ángeles Moreno, con el tema Esquema Financiero de la Ciudad, West estableció que el tema capitalidad/centralidad debe ser considerado primordial en la reforma político-administrativo del DF.

En su ponencia el legislador comentó que el gobierno citadino hace el planteamiento de los costos que tiene que enfrentar por ser capital de la país, a partir del análisis de las personas que llegan de fuera a trabajar o de paseo, lo cual es incorrecto, ya que se deben abarcar los costos que implican ser la sede de los poderes nacionales.

“La realidad, es que la cualidad y condición de capitalidad de la república que tiene la Ciudad de México, conlleva tanto cargas como amplios beneficios a la hacienda pública local, los cuales deben ser distinguidos y precisados para estar en condiciones de objetividad al abordar el asunto”, indicó el priísta.

Añadió que ser la capital del país, implica ser el sitio en el que se asientan los poderes federales, pero asimismo las oficinas matrices de los bancos del país, la Bolsa Mexicana de Valores, otras instituciones financieras, las oficinas centrales de las empresas más importantes de México, etc… Todo ello impacta de manera muy favorable al Producto Interno Bruto de la entidad.

Octavio West precisó que la capital, al dar asiento a los poderes federales registra el 30 por ciento del número total de trabajadores y pensionados de la burocracia federal, lo que revela que prácticamente un millón de ellos tengan su domicilio en D.F.
Dijo que caso análogo ocurre con la educación superior del país, las principales instituciones educativas, de ciencia y tecnología se radican en la capital, al igual que los institutos nacionales de salud, las embajadas, representaciones diplomáticas y oficinas de diversos organismos internacionales.

“Cuenta así el DF con un amplísimo espectro de actividades y dispositivos que promueven su crecimiento económico y desarrollo cultural y social. Y así, ser capital del país, reporta entonces una gran cantidad de beneficios económicos al Distrito Federal, en este orden de cosas se hace necesaria una evaluación objetiva de los costos y beneficios que en un balance ofrece la condición de capitalidad”, abundó West.

Aludió que en el proyecto de Presupuesto de Egresos del Distrito Federal para 2011, el ejecutivo local incluyó un apartado en el que se consigna seis ámbitos con sus respectivos rubros, en los que considera se radican los costos de capitalidad: beneficios provenientes de la implementación de programas sociales, costo de oportunidad respecto al espacio físico utilizado por los órganos y poderes federales, programas y sistemas para protección civil, requerimientos de seguridad pública, conservación de infraestructura cultural; entre otros rubros vitales para el crecimiento citadino.

“Se estima que el costo de capitalidad en el que incurre anualmente la Ciudad de México es aproximadamente de 14 mil millones de pesos, recursos que representan alrededor de 10 por ciento del presupuesto total del Distrito Federal”, añadió el también vicepresidente de la Comisión de Programación y Cuenta Pública de la ALDF.

Octavio West aseguró que a pesar de que principalmente en los países europeos se encuentra en boga el tema de los costos de capitalidad, en nuestro país poco o nada se ha avanzado en la elaboración de un marco teórico que permita determinar con claridad y precisión los conceptos aplicables, y mucho menos en la construcción de los modelos econométricos que permitan establecer los costos debidos a externalidades sobre la capital.

En consecuencia, precisó que “se hace necesario entonces avocarse a tales tareas para evitar cifras sin fundamento, tales como las que produce el método de tanteo que aplica el Gobierno de la Ciudad. Esto ocurre debido a las externalidades que generan los bienes y servicios públicos provistos de los que no sólo se benefician sus residentes sino también las personas que desarrollan todas sus actividades en la capital aún sin habitar en ella, así como aquellos ciudadanos circundantes a la propia ciudad. Por estas razones, resulta necesario obtener partidas especiales para que la Ciudad de México mantenga debidamente su infraestructura, su calidad de servicios y su competitividad.