El novelista histórico debe convertir a los héroes de México en hombres de carne y hueso
10 de Noviembre de 2010
Para David Martin del Campo hay que desmitificar las obras de los héroes oficiales de la historia, porque “el novelista hace a los participantes de la historia hombres de carne y hueso, con sus enormes defectos, sus exitosas virtudes y quita el velo de ícono nacional a quien fue sólo un libertador o revolucionario como tantos miles”.
Durante las Mesas Redondas y Entrevistas “Los Escritores, la Asamblea y los Bi-Centenarios” organizado por la Coordinación General de Comunicación Social de la Asamblea Legislativa, correspondió compartir experiencias y relatos al periodista y novelista David Martín del Campo, quien posee una basta aportación literaria de más de 20 narrativas, la mayoría relacionada a los acontecimientos del México contemporáneo.
El escritor consideró, como un ejemplo para desmitificar el caso del cura Miguel Hidalgo, a quien consideró un hombre que tuvo sus veleidades, que pecó como cualquier cristiano, pero que la literatura oficial quiere encubrir como un personaje intachable; pero los novelistas, insistió, los hacemos hombres de carne y hueso.
El creador de libros como “Alas de ángel”, “El año del Fuego”, “Quemar los pozos”, “Cielito Lindo”, en donde narra y detalla pasajes de los héroes que hicieron historia en el país, destaca que el novelista rescata los hechos y actores de la historia, pero los perfila de manera diferente.
En su libro “Cielito Lindo” que es una narrativa de la expedición militar mexicana del Escuadrón 201 rumbo a Japón, comentó que los pilotos viven experiencias propias de jóvenes de entre 22 y 25 años de edad, entre la buena vida, las mujeres y la diversión.
En la sesión de preguntas, los asistentes a esta mesa le preguntaron si los novelistas mienten al recrear al personaje. “El autor miente, aunque sea poquito, al desarrollar su trabajo, desde luego, nos apoyamos en documentos y entrevistas, a las que salpicamos de algún mentirilla para hacer ameno, real, creíble el relato”.
La historia de los hechos debe escribirse luego de cinco o seis años de pasado el suceso, pues de inmediato se convierte en crónica, relatos fríos, duros, rígidos, carentes de atractivo, vivencias y realidades, comentó.
Las Mesas Redondas y Entrevistas con los novelistas que reseñan la historia de México seguirá con otros connotados escritores en el recinto legislativo de Donceles y Allende. El próximo miércoles asistirá el escritor Hernán Lara Zavala, a las 13:00 horas. La entrada es libre.