PAN PIDE ABRIR PADRON DE BECARIOS
20 de Junio de 2011
Ante la incertidumbre por el uso y destino de 48 millones de pesos que la Asamblea Legislativa del Distrito Federal etiquetó para becar a más de 2 mil jóvenes estudiantes de nivel medio superior y superior en la Ciudad de México, el Grupo Parlamentario del Partido Acción Nacional exigió a la presidenta de la Comisión de Gobierno abrir el padrón de beneficiarios y ser congruente con la bandera de transparencia que presume ostentar.
Los legisladores de Acción Nacional consideraron que ante la negativa para transparentar esta información, debe ser la Secretaría de Educación Pública (SEP) la encargada de revisar todo lo relativo al Fideicomiso del Fondo de Apoyo a la Educación y al Empleo de las y los Jóvenes del DF.
El riesgo que se corre, expusieron, es que la transferencia de recursos se realice a instituciones educativas cuya seriedad y calidad educativa estén fuera de los estándares deseables, mejor conocidas como “escuelas patito”.
Pero peor aún, enfatizaron, es que ni siquiera se puede dar seguimiento al desempeño de los jóvenes que acuden a estas instituciones privadas, pues el argumento de la ALDF es que “el nombre de los beneficiarios se considera como datos personales de acceso restringido”.
“Pareciera que un pequeño detalle, como es el nombre de un joven matriculado en una escuela, no tiene importancia. Sin embargo, podría ser el principio de un gran fraude”, destacó la legisladora al lamentar el doble discurso del PRD, quienes “un día están a favor de la transparencia y al otro ocultan información”, puntualizaron.
Al externar su preocupación porque entre julio y agosto se duplicará el número de beneficiarios, los cuales hasta este momento no tienen identidad por la opacidad que persiste en el órgano legislativo, la Coordinadora del GPPAN, Mariana Gómez del Campo Gurza, sostuvo que la “confidencialidad” a la que hacen referencia no tiene razón de ser, ya que hay otros programas, como el de apoyo a Adultos Mayores, donde sí se han dado a conocer los padrones de beneficiarios.
“No hay pretexto. Lo que ocurre con los recursos públicos es de interés general y no hay argumento que valga para mantener ocultos los detalles sobre el padrón de becarios”, aseveró Gómez del Campo.
Comentó que para hacer uso del citado Fideicomiso la ALDF signó un convenio con siete instituciones privadas, de las cuales sólo una cuenta con algún tipo de certificación, en este caso de la Federación de Instituciones Mexicanas Particulares de Educación Superior (FIMPES).
La diputada destacó que, sin duda, la Ciudad de México requiere acciones que van más allá del otorgamiento de becas para resolver el problema que miles de jóvenes capitalinos enfrentan año con año por la falta de oferta educativa.
Expuso que debe evitarse que se repita la historia de “Prepa Sí”, pues como se denunció anteriormente algunos de sus beneficiarios utilizaban los recursos de la beca para comprar drogas, no obstante que el número de niñas, niños y jóvenes que consumen sustancias ilegales en el Distrito Federal se ha elevado significativamente.
Finalmente, comentó que aunque el presidente de la Comisión de Vigilancia ya declaró que se hará pública la información, es una intención que sólo queda en el discurso, ya que la constante hasta este momento es la de mostrarse, con hechos, al lado opuesto de la transparencia.
