Policías socialmente sensibles y cercanos a ciudadanos, pide Felipe de la Cruz
26 de Abril de 2017
· Llama a reconstruir el tejido social y devolver las instituciones a los ciudadanos
· Dos recomendaciones de la CDHDF hacia la SSP son por violaciones hacia sus propios elementos, señala
Al reconocer a los policías que con su valor, honestidad e integridad moral brindan un servicio a la ciudadanía, y a quienes fallecieron en el cumplimiento de su deber, el diputado de morena Felipe de la Cruz Ménez, señaló la urgente necesidad de reconstruir el tejido social y devolver las instituciones del Estado a los ciudadanos.
Durante la entrega de la medalla al Mérito Policial en la Asamblea Legislativa, el diputado de morena lamentó que hoy en día y como resultado de las estrategias de seguridad implementadas a partir de 2006, la Ciudad de México tenga una sociedad herida, una la fuerza pública desgastada, instituciones cuestionadas y pocos avances en el combate a la impunidad.
En este contexto de pérdida de confianza en las instituciones, el legislador aseguró que no basta con que un cuerpo policiaco sea sólido y contundente, es necesario que sea socialmente sensible y cercano al pueblo.
Lamentó que los policías capitalinos enfrenten una serie de dificultades, no sólo de falta de equipo para desempeñar su labor o de estímulos económicos, sino del comportamiento inapropiado y malos tratos de algunos de sus mandos.
Basta con señalar que dos de las 16 recomendaciones de Comisión de Derechos Humanos local hacia la Secretaría de Seguridad Pública, son por violaciones laborales, de seguridad y por la deficiente calidad de servicios sociales hacia sus propios elementos.
De la Cruz Ménez destacó que este año, la Secretaría de Seguridad Pública posee un presupuesto histórico de casi 16 mil 500 millones de pesos, mismos que deben direccionarse para establecer mejores condiciones laborales a los policías, dar un respeto absoluto a sus prestaciones, certeza jurídica, así como brindar servicios de salud, educación y vivienda de calidad para las familias de los oficiales.
Lo menos que puede hacer un gobierno es respetar los derechos laborales del pueblo uniformado, e implementar estrategias para disminuir el distanciamiento entre los ciudadanos y la fuerza policiaca, concluyó Felipe de la Cruz.