PROMUEVE REFORMA LABORAL QUE BENEFICIE AL TRABAJADOR
22 de Octubre de 2012
La inestabilidad económica que padecen los países industrializados, está provocando en México un crecimiento lento que allana más la pobreza y el Distrito Federal no es ajeno a esta situación, señaló el diputado Rubén Erick Jiménez Hernández, al referirse al desempleo que padece nuestro país.
En entrevista, el legislador subrayó que diariamente empresas que se manejan bajo el término outsourcing, despiden injustificadamente a sus empleados negándoles cualquier prestación, así como su liquidación, como lo estipula la ley.
“Es importante decir, con toda responsabilidad, que la clase trabajadora, los desempleados, la gente contratada por terceros, exigen una reforma laboral que defienda los derechos del trabajador, su jornada de ocho horas, su derecho a la huelga, un salario justo y digno por jornada laboral y no por horas, así como una representación sindical que rinda cuentas a sus representados”, precisó.
El joven asambleísta, dijo que en la pasada comparecencia del titular de la Secretaría del Trabajo del Distrito Federal, puso sobre la mesa que los bajos salarios y el incremento mensual en los combustibles, provocan una escalada en los precios de los productos de primera necesidad, que está afectando a la clase trabajadora.
Agregó que la política laboral, la situación económica, la violencia social y la deficiencia de las instituciones, “nos piden al gobierno y a la Asamblea Legislativa acuerdos serios, formales y de largo plazo”.
En este sentido, el diputado priista recalcó que una de las prácticas más nocivas que ha proliferado, es la contratación por terceros, llamada outsourcing para la prestación de servicios, donde los trabajadores no tienen seguridad social, médica y ninguna prestación, práctica solapada por el Gobierno del Distrito Federal.
“El Gobierno capitalino debe terminar de una vez por todas con los contratos de servicios de terceros”, dijo el legislador, al tiempo de recordar que solicitó a Mirón Lince comprometerse para defender los derechos laborales y encontrar una solución a esta práctica nociva que está impulsando a los trabajadores a refugiarse en el comercio informal.
En este contexto, dijo que una de las formas de trabajo más golpeadas por parte de las autoridades es la del comercio en vía pública y denunció que la policía capitalina, con lujo de violencia golpea al comerciante y la mercancía que decomisa en vez de depositarla en sitios oficiales la reparte como botín.
“Los comerciantes en vía pública ni son delincuentes, ni son un mal para la ciudad, son un eslabón del desempleo que buscan un ingreso que los provea para cubrir sus necesidades más elementales, ante la indiferencia de las autoridades por generar empleo y educación de calidad”, resaltó.
De igual forma, reveló que existe un sector de la población denominado de los “no asalariados”, que va desde jóvenes hasta personas de la tercera edad, e incluso personas con capacidades diferentes. “Que sobrevive gracias a la buena voluntad de empresas que los contratan como cerillos o mensajeros, pero sin un salario base y menos protección social”.
Derivado de lo anterior, el legislador propuso a las autoridades capitalinas la construcción de un acuerdo real para todas estas personas que conlleve el reconocimiento de instituciones oficiales para que se les otorgue una acreditación, y de esta forma se cree un padrón de gente que paga impuestos y cuente con servicios médicos.