Solicita ALDF a jefes delegacionales informe sobre manejo de cascajo
10 de Agosto de 2016
· Los diputados perredistas Leonel Luna e Iván Texta se pronunciaron por incentivar la preservación del medio ambiente y el cuidado de la salud de la ciudadanía, a través del reciclaje y reutilización de los residuos sólidos provenientes del sector de la construcción
La Diputación Permanente de la Asamblea Legislativa del Distrito Federal (ALDF) exhortó hoy a las y los Jefes Delegacionales de la Ciudad de México a informar sobre la generación y manejo de residuos sólidos provenientes de actividades de construcción que se realizan en las demarcaciones, comúnmente conocido como cascajo.
En un punto de acuerdo promovido por los diputados del Partido de la Revolución Democrática (PRD), Leonel Luna Estrada e Iván Texta Solís, presidentes de las comisiones de Gobierno y de Vigilancia de la Auditoría Superior de la Ciudad de México, respectivamente, se consideró indispensable contar con datos y registros pormenorizados y actuales sobre los volúmenes de tales desechos.
Durante su intervención en tribuna, Texta Solís dijo que la ALDF busca coadyuvar en la dotación de infraestructura necesaria para atender esta problemática, que tiene como gran pendiente la promoción e impulso de sistemas de minimización, reciclaje y aprovechamiento de los residuos sólidos entre los ejecutores de obras, ya sea del sector privado o público.
“Queremos impulsar un cambio de cultura y una estrategia que permita desde los gobiernos delegacionales atender la situación brindando opciones que, sin afectar la hacienda pública, propicien el cuidado y la preservación del medio ambiente, así como la salud de la gente, a través de la inserción de esquemas de reciclamiento y reutilización”, comentó el legislador perredista.
La disposición final de los residuos sólidos de manejo especial provenientes de la construcción que se realiza en la Ciudad de México se ejecuta frecuentemente en sitios clandestinos, principalmente en suelo de conservación, sobre el que se vierte material de excavación, restos de ladrillo, azulejos, mortero, concreto, yeso, madera, plásticos, solventes y pintura; metales y otros materiales utilizados en los procesos constructivos de obras.
Estos desechos, explicó Iván Texta, generan un impacto ambiental que se traduce en la obstrucción de arroyos, cañadas y barrancas; afectaciones al drenaje natural, azolve de las partes bajas e inundaciones de zonas aledañas en temporada de lluvias; afectación de la flora y la fauna, contaminación en suelo y subsuelo e incluso de acuíferos, daños en zonas de recarga de agua subterránea, impacto visual del entorno, proliferación de polvo y de fauna nociva.
Recordó que en la Ciudad de México existe sólo una planta de reciclaje en operación y 17 empresas autorizadas por la Secretaría de Medio Ambiente local (Sedema) para el transporte de los residuos de este tipo, las cuales tienen en su conjunto únicamente 147 vehículos registrados.
“Ante el escenario de inminente crecimiento de la generación de residuos sólidos provenientes de la construcción, surge la necesidad de crear infraestructura para manejarlos adecuadamente y evitar su impacto negativo sobre el medio ambiente y la calidad de vida de los habitantes de la Ciudad de México”, consideró Texta Solís.
Como cualquier actividad económica que emplea insumos en su labor, los transforma y procesa, también genera residuos, principalmente sólidos, por ejemplo, escombros por demolición, materiales térreos producto de excavación y concretos, entre otros materiales.
De acuerdo con los registros de la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción (CMIC), a nivel nacional se estima una generación anual de 6 millones de toneladas de residuos de construcción y demolición; es decir, 17 mil toneladas diarias en promedio, de las cuales al menos 7 mil provienen de obras que se ejecutan en la Ciudad de México.
La diputada de Movimiento Ciudadano (MC), Vania Roxana Ávila García, se adhirió al punto de acuerdo de los diputados perredistas.