URGE DEFINIR LA AUTORIDAD QUE ADMINISTRE FIDEICOMISO SANTA FE: DIPUTADOS Y DELEGADO EN ÁLVARO OBREGÓN
09 de Febrero de 2010
Boletín # 342
Los integrantes de la Comisión de Desarrollo e Infraestructura Urbana coincidieron con el jefe delegacional en Álvaro Obregón, Eduardo Santillán, en que se debe transparentar el ejercicio de más de 120 millones de pesos del Fideicomiso del Complejo Santa Fe, definir a qué delegación se adjudicará su administración y propiciar un desarrollo equilibrado de esa zona a partir de la revisión de los planes Parcial y Delegacional de Desarrollo Urbano.
El presidente de la Comisión de Desarrollo e Infraestructura Urbana de la Asamblea Legislativa del Distrito Federal, Guillermo Sánchez Torres, aseguró que hay opacidad en el manejo de los recursos públicos del fideicomiso, porque “pareciera que en Santa Fe los únicos que pueden invertir o construir son los amigos de los que manejan el complejo”, afirmó.
El legislador preguntó a Santillán cuál considera que puede ser el mejor mecanismo para determinar a qué delegación -Álvaro Obregón o Cuajimalpa- debe pertenecer la zona de Santa Fe y qué demarcación debe en consecuencia administrar el fideicomiso. El diputado Sánchez Torres planteó que esa decisión podría tomarse mediante una consulta o con base en las vías de comunicación o por cuestiones orográficas. También destacó la necesidad de definir cuándo debe extinguirse el fideicomiso. Pidió considerar que al tomar esas decisiones se considere si se mejorará la prestación de servicios públicos.
Por su parte, el jefe delegacional explicó que debido a que el Fideicomiso Santa Fe tiene un régimen de excepción, al ser el único territorio del Distrito Federal que no es gobernado por ninguna autoridad delegacional, es necesario que dependa de las delegaciones Álvaro Obregón o Cuajimalpa y comparta sus beneficios con los vecinos.
Propuso generar una figura especial para atender este complejo urbano como ocurre en el Centro Histórico; que se instalen de inmediato oficinas de gobierno en esa área para proporcionar servicios y agilizar trámites.
En la reunión de trabajo, el diputado José Alberto Couttulenc preguntó si se audita el ejercicio de los recursos del fideicomiso, si existen registros para evitar que esos recursos se vayan a intereses particulares y cuál sería la delegación idónea para su manejo.
El legislador Fernando Cuéllar señaló que, debido a que Santa Fe le cuesta cada día más a las delegaciones, debe ser una zona autosustentable. Por eso pidió a Santillán explicar por qué debe ser administrado el fideicomiso por una delegación. Además, demandó que se detallen las prioridades en materia de seguridad pública, vialidades, drenaje, tratamiento de aguas negras y potable.
Al hacer un extrañamiento al jefe delegacional por “no haber asistido a la anterior sesión”, el diputado Rafael Calderón pidió la opinión de Eduardo Santillán sobre la realización de una consulta ciudadana para que la población de Santa Fe decida en qué delegación debe quedar delimitado su territorio.
El representante popular Adolfo Uriel González Monzón, se refirió a las obras prioritarias proyectadas para evitar que las barrancas cercanas a Santa Fe sigan siendo zonas de basurero o de descargas clandestinas de aguas negras, además de los proyectos existentes para reforestar la zona.
Tras señalar que el proyecto Santa Fe nació con el objetivo de generar desarrollo alrededor de la zona y dar empleo a sus vecinos, el diputado Juan Pablo Pérez Mejía solicitó la información respecto del impacto real que tuvo el complejo entre los ciudadanos, ya que de no haber cumplido con las metas, el fideicomiso faltó a lo establecido.
En su comparecencia, el jefe delegacional Eduardo Santillán explicó que los colonos del principal polo de desarrollo económico de la ciudad manejan un recurso público de 120 millones de pesos y en consecuencia administran el pago de los servicios de seguridad pública, recolección de basura, alumbrado público y bacheo, entre otros.
Esta condición de excepción ha generado un desarrollo económico, inmobiliario, financiero y de calidad de vida extraordinarios, ya que es el principal desarrollo económico de las delegaciones Cuajimalpa y Álvaro Obregón y del municipio mexiquense de Huixquilucan.
El crecimiento registrado, advirtió, puede convertir a esa zona en "la nueva Ciudad de México", aunque es una zona para automovilistas que carece de espacios públicos comunes, transporte público y de vialidades que ayuden a eliminar los problemas de tránsito.
Ello hace necesario inducir un desarrollo equilibrado durante la revisión del Plan Parcial de Desarrollo Urbano de la Zona de Santa Fe y de los programas de Desarrollo Urbano de las delegaciones Álvaro Obregón y Cuajimalpa, y sostuvo que sin los debidos controles sobre el crecimiento demográfico y de infraestructura urbana, las barrancas y zonas de reserva natural pueden sufrir graves daños ecológicos.
Por último, reconoció que a partir de noviembre de 2009 ambas delegaciones se integraron al Comité Técnico del Fideicomiso, significando un importante avance en el manejo de los recursos al tener voz y voto en la toma de decisiones.