VÍCTIMAS DE MOBBING EN DF RECIBIRÁN APOYO PSICOLÓGICO
27 de Junio de 2011
Si eres víctima de maltrato, hostigamiento o recibes presiones por parte de tu patrón o compañeros para que abandones o renuncies a tu trabajo, “ya podrás recibir el apoyo psicológico necesario para enfrentarlo”, aseguraron los diputados Mariana Gómez del Campo Gurza y Jorge Palacios Arroyo.
Lo anterior, luego de que la Comisión de Salud y Asistencia Social aprobará la Iniciativa con reforma al artículo 63 de la Ley de Salud del Distrito Federal, presentada por los legisladores del PAN el pasado 26 de mayo, para que el acoso laboral o mobbing sea considerado como un problema de salud pública.
De esta forma se obliga al Gobierno del Distrito Federal y autoridades competentes a establecer, además de los programas especializados de apoyo psicológico para víctimas de violencia intrafamiliar y abuso infantil, los de prevención de los problemas de salud pública relacionados con el acoso laboral y la violencia e intimidación en el ámbito escolar que incorpore la atención correspondiente a la víctima, agresor y observadores.
Los diputados subrayaron que la aprobación de la iniciativa en la Comisión de Salud representa un gran paso para que ésta sea aprobada ante el Pleno a la brevedad. “Con ello, los trabajadores de la Ciudad de México contarán con las condiciones apropiadas para desarrollar sus actividades dentro de un ambiente sano”.
Gómez del Campo indicó que el mobbing no debe ser tratado como un ente aislado, ya que su impacto no sólo repercute en el área laboral, sino en las familias y la sociedad en general, pues es un fenómeno que está en aumento y de no tomarse las medidas correspondientes, representará un grave problema.
Por ello, afirmó que el GPPAN seguirá impulsando iniciativas que den certeza y estabilidad emocional a los trabajadores para laborar en ambientes armónicos y con las mejores condiciones, que fortalezcan la vocación de servicio.
Por su parte, Palacios Arroyo, también integrante de la Comisión de Salud, señaló que los síntomas más habituales de la afectación sobre la salud de la víctima son: dolores de cabeza, musculares y articulaciones, alteraciones en sus relaciones personales e irritabilidad, que pueden derivar en trastornos de ansiedad, ataques de pánico, sensación de muerte inminente o cardiopatías.
Mientras que las repercusiones en el trabajo son: aumento notable de las consultas al servicio médico, accidentes por desatención, negligencia, descuidos instantáneos y voluntarios. En la familia son: afectación de la afectividad y del deseo sexual, así como la separación de la pareja llevándola incluso al divorcio y suicidio, concluyó.